Header Ad

Categories

Most Popular

La falta de amor en la infancia evita que puedas darlo de adulto

Lo que se viva en la niñez marcará para siempre el carácter de las personas, por eso si la tuya no fue feliz las posibilidades de que seas un adulto con problemas emocionales son muy altas.

La falta de amor en la infancia nos roba la felicidad en la etapa adulta. Las raíces de tu vida, es decir las acciones, emociones y vivencias de la niñez, así como la forma en la que aprendiste a ver el mundo y a verte a ti mismo va a definir tus sentimientos, acciones y encuentros con los otros en tu vida adulta.

Dile adiós al pasado

Ten en cuenta que ya eres un adulto. Sin embargo debes revisar a fondo tus vivencias de la niñez, ya que estás van a delinear tus relaciones y harán que las comprendas y puedas evaluar su desarrollo para mejorarlas radicalmente.

De acuerdo a la psicóloga española Valeria Sabater, cuando en las personas existe un vacío emocional, un sentimiento de culpa y nos sentimos inadecuados constantemente, podemos haber sufrido negligencia emocional en la infancia.

Niños sin amor, adultos infelices

Esto quiere decir que si al ser niño no recibimos la guía adecuada para procesar nuestros sentimientos y emociones, al llegar a la vida adulta no seremos capaces de dar amor.

La negligencia afectiva no es fácil de procesar por la mente de un niño; ellos, al fin y al cabo, no entienden por qué sus progenitores no responden a sus necesidades. Tanto es así que a la experiencia de soledad y desamparo suele añadirse el sentimiento de culpa

Las secuelas de una infancia sin cariño

Según lo dicho por la  psicóloga Sabater, hay algunas que quedan para siempre en la mente de un niño.

Factores como el abandono, una educación autoritaria o la figura de uno de los padres emocionalmente no disponibles, deja secuelas evidentes en el desarrollo psicológico del niño

¿Qué debemos hacer?

En primer lugar, tratar de comprender ese niño que fuimos, reconocer que existen huecos que nos hacen actuar hoy «sin querer queriendo» es decir amando y maltratando al mismo tiempo. En caso que hayas notado este comportamiento en ti, ya es un gran logro.

Una solución sanadora, integral y definitiva es siempre amar. ¿Cómo hacerlo?. La respuesta la tiene Laura Gutman y es «evitar a toda costa el sufrimiento y procurar el bienestar que es el lugar común de todo ser vivo.

Amar es cuidar, amar es atender

En caso de que hayas vivido una infancia carente de cercanía emocional, conviértete en un promotor de esa práctica hacia ti mismo y hacia los demás, especialmente tu familia y pareja. Vas a ver que la belleza que el amor provoca en todo lo que toca y comenzarás a sanar.