La anemia es una enfermedad ocasionada cuando la sangre no transporta la cantidad de oxígeno necesario a todos los órganos del cuerpo, la falta de oxígeno se traduce en debilidad y cansancio. Existen muchas formas de anemia, cada una con su propia causa. La anemia puede ser temporal o prolongada y puede oscilar entre leve y grave. Consulta con el médico si sospechas que tienes anemia. Puede ser una señal de advertencia de una enfermedad grave.
Para contrarrestar los síntomas de la anemia, uno de los alimentos más recomendados es el hígado de res.
El hígado aporta también hierro, mineral necesario para la salud sanguínea, una porción de 85 gramos de hígado aportan 4 miligramos de hierro. Además este mineral ayuda a oxigenar el cerebro, ayuda al sistema inmunológico y elimina patógenos dañinos, otros minerales contenidos en el hígado son el fósforo y el zinc.
Aporta también vitamina A para fortalecer la visión. Sin embargo, es un alimento que no se puede consumir de manera diaria, pues podría tener repercusiones negativas en la salud.
Los nutrientes necesarios para evitar la anemia son:
- Hierro. Los alimentos ricos en hierro incluyen carne vacuna y otras carnes, frijoles, lentejas, cereales fortificados con hierro, verduras de hoja verde oscuro y frutas secas.
- Folato. Este nutriente, y su forma sintética de ácido fólico, se pueden encontrar en frutas y jugos de frutas, verduras de hojas verdes oscuras, arvejas verdes, frijoles rojos, cacahuates y productos de granos enriquecidos, tales como pan, cereales, pasta y arroz.
- Vitamina B-12. Los alimentos ricos en vitamina B-12 incluyen la carne, los productos lácteos y los productos fortificados a base de cereales y soja.
- Vitamina C. Los alimentos ricos en vitamina C incluyen frutas y jugos cítricos, pimientos, brócoli, tomates, melones y fresas. Estos también ayudan a aumentar la absorción de hierro.