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Los pantalones, ¿colgados o doblados?

A la hora de organizar un armario, espacialmente si es pequeño, nos surgen dudas de cómo sacarle el máximo partido para que te quepan más prendas y además estén organizadas: qué debe de ir colgado, qué doblado…
Esto depende del tipo de prenda y de cómo sea tu armario (si tiene mucho espacio para colgar o muchos cajones…)
En general, la ropa colgada ocupa menos que la doblada y no se arruga tanto. Algunas prendas que debes de colgar sí o sí son prendas de lino y seda, camisas, vestidos, faldas, trajes, abrigos y pantalones.
Sin embargo, las prendas que pueden ir dobladas son camisetas, jeans, jerséis o polos.
Hoy nos vamos a centrar en los pantalones y te vamos a contar cómo tienes que guardar tus pantalones en el armario para tenerlos siempre organizados y con las menos arrugas posibles.

Cuando colgar los pantalones
Lo primero que debes de hacer es sacar todos tus pantalones y repasar cuántos tienes y ver si se arrugan con facilidad.
También tienes que observar tu armario y pensar cuánto espacio tienes para colgar y cuánto para doblar.
En la barra de colgar
La opción de la barra de colgar es adecuada cuando tienes una barra muy larga y tienes espacio para colgar las camisas, chaquetas y vestidos y todavía te sobra espacio para colgar los pantalones.
En este caso, no cuelgues más de un pantalón por percha o tu armario acabará siendo un caos total. Te resultará complicado encontrar el pantalón que necesitas y se arrugará con facilidad.

Cuando doblar los pantalones
Si no quieres colgar los pantalones, tienes la opción de guardarlos doblados en cajones.
Esta opción es recomendable cuando tu armario tiene muchos cajones, una barra de colgar pequeña y no tienes ningún hueco para instalar un pantalonero.
Para guardarlos en un cajón, lo mejor es doblarlos en vertical, que es la opción más cómoda y con la que menos se arrugan. Aunque siempre se arrugan más que colgados.
Te contamos cómo doblar los pantalones:
Lo primero es sacudir los pantalones para deshacerte de cualquier pliegue o arruga que tenga.
Después, pon los pantalones sobre la cama y alinea las piernas de los pantalones, de modo que, al doblar una pierna por encima de la otra, las costuras queden hacia afuera y no se formen ninguna arruga.
Por último, dobla el pantalón en tres partes iguales. Dobla el dobladillo hasta la mitad de las piernas y luego dobla nuevamente la parte de la cintura por encima, hasta el borde de los pantalones.
Si en tu armario tienes poco espacio, echa un vistazo a nuestro post del blog «Cómo guardar los pantalones para ahorrar espacio en el armario», en el que te damos un montón de ideas y soluciones para guardar tus pantalones.