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Renueva tus pies… En tu propio hogar

La misión es la siguiente: eliminar callosidades y la acumulación de piel muerta para desvelar unos pies suaves, frescos y unas uñas envidiables. Este ritual está diseñado con gestos especiales que les darán confort, descanso y aliviarán tensiones acumuladas. Nada más vigorizante que unos pies consentidos.

¿Qué necesitas?
1. Un recipiente grande y profundo para sumergir ambos pies
2. Agua tibia, aceites esenciales o sales marinas
3. Toalla
4. Removedor de cutícula
5. Espátula o palito de naranjo para levantar la cutícula
6. Lima y un removedor de callosidades
7. Cortauñas
8. Producto exfoliante
9. Piedra pómez
10. Esmalte transparente o de color
11. Quitaesmalte

Primer paso: El baño

Lavarlos con agua tibia, sales o aceites esenciales ayudará a eliminar las tensión al instante. Esta acción permitirá ablandar las zonas rugosas y facilitar el corte de las uñas y remover las cutículas. Para mejorar la experiencia

  • Agrega agua caliente a un recipiente que sea lo suficientemente profundo para que el nivel del líquido llegue hasta los tobillos.
  • Agrega tabletas efervescentes o sales minerales para relajar los músculos y las tensiones que se forman por el caminar o el uso de zapatos altos.
  • Si añades unas gotitas de aceites esenciales como lavanda o cedro, mejorarás la experiencia. Facilitarás el descanso y además, relajarás los músculos.
  • Mantén los pies adentro alrededor de 5 minutos y retíralos. Así evitarás que la piel se deshidrate y las uñas se vuelvan demasiado porosas. Sécalos, mientras ejerces ligeras presiones.

Segundo paso: La exfoliación

Una vez que el baño remojó los pies, éstos se encontrarán listos para ser exfoliados. En este paso también será necesario remover callosidades y eliminar la piel muerta acumulada en los talones. Toma en cuenta lo siguiente:

  • Usa un producto exfoliante granulado para retirar con movimientos suaves las células muertas. Pon especial énfasis en la piel de los talones o zonas con callosidades siempre y cuando no esté irritada o expuesta.
  • Exfolia también tus uñas, quitarás la piel acumulada, las pulirás y facilitarás la tarea de remover las cutículas.
  • Pon especial atención en el hueco que se forma en la parte inferior del hueso del tobillo. Con una exfoliación dedicada podrás remover células muertas que oscurecen esa zona.
  • Retira el exfoliante con una pequeña toalla humedecida en agua caliente. Seca.
  • Puedes usar una piedra pómez o una lima para eliminar las rugosidades y la piel muerta.

Tercer paso: La humectación

Una vez que tus pies están suaves, es importante aplicar una crema humectante. De esta manera, mantendrás los efectos de la exfoliación por más tiempo y evitarás que se formen capas muy rugosas con el paso de los días. Considera que:

– Se recomienda usar una crema diseñada para hidratar los pies. Normalmente se tratan de fórmulas ligeras, con activos calmantes y refrescantes que se absorben de manera rápida.

– Otra opción formidable son los humectantes con alfahidroxiácidos. Contienen ácidos de frutas exfoliantes que ayudan a renovar las células de la piel de manera constante y evitan que se acumulen capas de piel muerta.

Cuarto paso: Embellece tus uñas

Es importante retirar la piel muerta que se acumula de manera desordenada a lo largo de las uñas y engrosa las cutículas, para aplicar favorablemente color o brillo. Es también el momento ideal para cortarlas. Al hacerlo, toma en cuenta lo siguiente:

  • Al cortarlas, dales una forma recta para evitar que se entierren a los costados.
  • Distribuye un producto removedor de cutículas sobre éstas y una vez que las haya suavizado, retíralas empujándolas con un palo de naranjo o una espátula de metal. ¡Nunca las cortes!
  • Finaliza aplicando una crema para uñas y o bien, unas gotas de aceite humectante para protegerlas y humectarlas (siempre y cuando no vayas a poner esmalte).
  • Si las uñas se encuentran con restos de crema humectante o aceite y vas a aplicar color, límpialas antes con una bolita de algodón empapada de quitaesmalte.
  • Al poner el color usa unos separadores de dedos para que el esmalte no manche tu piel.