¿Te han salido muchas manchas en la cara con los años? Eliminarlas es más fácil de lo que pensabas. Solo necesitas un poco de papa cruda.
Desvanece manchitas y ojeras con solo un ingrediente, y que seguro ya tienes en casa.
¿A quién no le gustaría eliminar esas manchitas del rostro de manera rápida, efectiva y lo mejor de todo, súper económica? La respuesta es algo obvia, ¡a todas!
La papa es un tubérculo que ha ganado popularidad en las rutinas de skincare como método aclarador, pues sus nutrientes son capaces de actuar sobre la pigmentación de la piel, unificando su tono y liberándola de las terribles ojeras.
¿Por qué funciona?
Los principales componentes de este magnífico tubérculo son potasio, azufre, calcio, cobre, Vitamina B y vitamina C. Todos estos elementos combinados ayudan a que tu piel se renueve de forma más rápida aclarando las manchas del rostro. Así que prepárate para ver los resultados en poco tiempo, pues gracias a los enzimas que contiene la papa, el proceso será rapídisimo.
La papa cruda también ayuda a estimular la producción de colágeno, así que sí, tu piel también lucirá más joven y radiante.
¿Cómo usar la papa cruda para unificar el tono de la piel?
Lo ideal es usar la papa cruda para aprovechar al máximo todos sus nutrientes. Puedes usarla sola para aclarar puntos específicos como las ojeras o axilas, o puedes combinarla con otros elementos como el yogur.
Mascarilla de yogur con papa
Ingredientes:
1 papa
1 taza de yogur natural
Procedimiento:
Ralla la papa cruda.
Mezcla la papa con el yogur natural.
Aplica.
Modo de empleo:
Coloca la mezcla en tu rostro limpio y deja actuar la mascarilla durante 25 minutos. Enjuaga con abundante agua.
Tip: Puedes enjuagar con agua de arroz para potenciar el aclaramiento.
Aclarar manchas especificas
Si lo que buscas es disminuir la pigmentación de algunas partes de tu cuerpo como ojeras o axilas solo tienes que cortar en rodajas una papa cruda y aplicarlas en donde quieras aclarar. Es importante dejar actuar las rodajas durante 5 minutos y después enjuagar con agua fría.
Estamos seguras de que notarás los resultados en menos de lo que piensas, la clave está en ser constantes.