Lograr el tono, la cobertura y la fórmula que se sincronicen con las características de nuestra piel es un objetivo no demasiado fácil, pero las ciencia cada vez nos lo pone más fácil.
Cada una de nosotras tenemos unas características propias en la piel de nuestro rostro. Son un color y una textura que conforman una tez única y esto es lo que da lugar a la belleza de cada una. De hecho es en esto en lo que nos debemos basar a la hora de encontrar la base de maquillaje perfecta para nuestra cara. Algo que, precisamente por la cantidad infinita de tonos de piel que hay, a veces se pude complicar. ¿Cuántas de nosotras nos encontramos todavía en el camino de encontrar esa aliada perfecta?
Las firmas cosméticas son conscientes de lo complicado de esta búsqueda y cada vez ponen a disposición del consumidor más alternativas en cuanto a color y a acabados.
¿Cómo elegir mi tono de base?
Si te gusta ir a un punto de venta físico para poder probar texturas y acabados, hay varios consejos para acertar al elegir tu base de maquillaje que deberás tener en cuenta. Lo primero, según explican desde L’Oréal, es probar la base sobre la piel del cuello ya que la cara suele broncearse más, sobre todo ahora que llegamos de verano. Por otro lado, la zona central de la cara suele ser donde aparecen granitos, rojeces y otras imperfecciones, lo que modifica el tono real de la tez.