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Esta es la dieta japonesa que te ayudará a reducir tu cintura

Se trata de una dieta basada en el equilibro del yin y yang, pero que no deja de ser restrictiva.

La dieta macrobiótica es una tendencia que proviene de Japón, y que se ha vuelto muy popular para perder peso de manera rápida. Esta dieta, creada por el filósofo japonés George Ohsawa, se basa en el principio de Yin y Yang para lograr un equilibrio en las comidas.

La idea es no solo comer de manera equilibrada, sino adoptar nuevas rutinas como el ejercicio y la meditación. Además, es importante elegir alimentos orgánicos, cultivados localmente y de temporada. Otros alimentos que se suman a la lista de los seleccionados por esta dieta son los cereales integrales, como el arroz, la avena, la cebada, el trigo sarraceno o la quinoa, deben formar un 40-60% de la cesta de la compra.

Sin embargo, hay una serie de alimentos que deben evitarse, como el pescado azul, los frutos secos, el alcohol y los que tengan altos niveles de grasas. Por otro lado, debemos limitar el consumo de carne, mariscos, refrescos, pan y alimentos con hidratos de carbono, y comer frutas con moderación.

Es importante mencionar que esta dieta macrobiótica no es recomendable para todas las personas, especialmente para mujeres embarazadas o aquellas con trastornos alimenticios. Además, Japón tiene una de las mayores esperanzas de vida en el mundo, superando a países como España o Suiza, y esto se debe en gran medida a su forma de alimentación y cuidado del medio ambiente.

La dieta macrobiótica propone dividir los alimentos

  • 40-60% de cereales integrales, como arroz integral, avena, cebada, trigo sarraceno o quinoa.
  • 20-30% de frutas y verduras.
  • 10% – 25% de judías y productos derivados.

Alimentos que debes eliminar para siempre de tu vida

  • Patatas, pimientos y tomates.
  • Bebidas con cafeína, alcohólicas y refrescos.
  • Alimentos procesados (como pan blanco, bollería y galletas industriales) y alimentos con ingredientes artificiales.
  • Azúcar y productos que contengan azúcar, jarabe de maíz o melaza.
  • Vainilla.
  • Cerdo.
  • Frutas tropicales, como piñas y mangos.
  • Comida picante.
  • Condimentos, como el ajo y el orégano.