Aunque los expertos no comprenden completamente por qué la depresión y la epilepsia coexisten, pueden presentarse debido a numerosos factores. Estos incluyen:
1. Hormonas
Los efectos perturbadores de las crisis epilépticas pueden desencadenar desequilibrios hormonales, que podrían desempeñar un papel en las altas tasas de depresión en personas con epilepsia. En las mujeres, los niveles de la hormona sexual estrógeno pueden cambiar, lo que lleva a un bajo estado de ánimo.
2. Cambios en el cerebro
Un artículo del 2019 señala que la depresión y la epilepsia pueden afectar el mismo lóbulo temporal. Los cambios en dicho lóbulo debido a la epilepsia pueden incrementar el riesgo de depresión y viceversa.
3. Medicamentos
Los expertos médicos señalan que los pensamientos depresivos pueden aumentar los efectos secundarios adversos de los fármacos antiepilépticos (FAE). Asimismo, las personas que toman FAE pueden experimentar depresión como efecto secundario.
4. Factores psicosociales
Enfrentar los desafíos asociados con la epilepsia puede provocar estrés y depresión.
Un médico puede ayudar a una persona a hallar formas de controlar el estrés. Esto puede incluir terapias conductuales como la terapia cognitiva conductual (TCC).