Home Belleza Cómo hacer una mascarilla facial con aloe vera
Si se trata de plantas medicinales, el aloe vera o sábila es una de las primeras que viene a nuestra mente debido a sus muchos beneficios tópicos. Además de ser un gran cicatrizante natural, lo que realmente hace que el aloe vera sea genial para la piel son sus propiedades antisépticas, que favorecen la limpieza del rostro y la eliminación de células muertas.
Si tienes esta planta en casa y quieres usarla a nivel cosmético o dispones de un gel de aloe vera puro, en este artículo de un COMO te explicamos cómo hacer una mascarilla facial con aloe vera sencilla y efectiva, ¡lucirás un cutis hidratado, joven, radiante y hermoso!
Mascarilla de aloe vera para la cara: beneficios
El aloe vera es un poderoso hidratante y un gran regenerador de la piel, por lo que nos ayuda a combatir el envejecimiento prematuro y lucir un rostro hermoso y lozano. Además, es muy útil en casos de acné, estrías en algunas zonas del cuerpo, quemaduras por el sol o sequedad de la piel. Veamos a continuación cuáles son todos los beneficios del aloe vera para la piel de la cara:
Gran hidratante natural: previene la deshidratación e hidrata hasta las pieles más secas gracias a que es capaz de llegar a las capas internas de la piel y nutrir los tejidos desde allí. Ayuda a retener la humedad en la dermis para evitar así que se reseque.
Limpieza profunda: es un buen astringente, ayuda a desobstruir los poros limpiándolos profundamente y elimina toda aquella suciedad acumulada que puede acabar ocasionando la aparición de impurezas.
Combate el acné: sus propiedades astringentes, antibacterianas, limpiadoras y regeneradores, lo convierten en uno de los mejores remedios caseros para el acné que se puede utilizar. Actúa eficazmente contra las bacterias que provocan los granos, alivia la piel dañada, la desinflama y previene la aparición de nuevos brotes.
Rejuvenecedor y antiarrugas: sus propiedades antioxidantes protegen la piel de la acción de los radicales libres, que son los principales responsables del envejecimiento. Estimula la producción de colágeno y esto hace que la piel esté más flexible y elástica, a la vez que se previene y reducen las arrugas y líneas de expresión.
Atenúa las manchas: su efecto regenerador sumado a nutrientes como la vitamina C o la vitamina E permite reducir las manchas que aparecen en la piel debido a las exposiciones solares o al envejecimiento.
Calma y sana la piel dañada: actúa eficazmente sobre la piel irritada y dañada, proporcionando alivio, desinflamándola y refrescándola. Es muy útil para tratar quemaduras solares, eccemas, psoriasis, dermatitis, etc.